lunes, 18 de octubre de 2021

VEN Y VERÁS. VINE I VEURAS. Evangelio de San Marcos 10, 35-45; "CONTRA LA AMBICIÓN"



CONTRA LA AMBICIÓN

Evangelio de San Marcos 10, 35-45

Parroquias de Viladecans

Nuevamente hoy, a través de esta experiencia comunitaria y con la imprescindible ayuda del Espíritu Santo, intentaremos tener un encuentro personal con Jesús de Nazaret, y experimentar la presencia de Dios.

El evangelio que proclamaremos hoy es de San Marcos. En él, Jesús se encuentra con las ambiciones de sus propios discípulos ante un mal entendido Reino, el Reino de Dios.

ORACIÓN:

“Ven, Espíritu Santo, y enséñame a esperar. Porque las cosas que deseo no llegan rápidamente, enséñame a esperar.

Porque no puedo pretender que los demás cambien de un día para otro, enséñame a esperar.

Porque yo mismo voy cambiando muy lentamente, enséñame a esperar.

Porque la vida tiene sus estaciones y todo llega a su tiempo, enséñame a esperar.

Para que acepte que no estoy en el cielo sino en la tierra, enséñame a esperar.

Para que no le exija a este día lo que no me puede dar, enséñame a esperar.

Para que reconozca que el mundo no puede estar a mi servicio, enséñame a esperar.

Ven Espíritu Santo, y enséñame a aceptar que muchas cosas se postergan, para que valore lo que la vida me propone ahora, aunque sea pequeño, aunque parezca poco-

Ven, Espíritu Santo, enséñame a esperar, Amén.”

Proclamación de la palabra. Recordemos que la lectura del Evangelio es el eje fundamental, es la vida, la experiencia, las enseñanzas de Jesús de Nazaret. Dice así:

 

Lectura del Evangelio de San Marcos 10 ,35-45

“En aquel tiempo, se acercaron a Jesús los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron:

Maestro, queremos que nos concedas lo que te vamos a pedir.” Les preguntó: “¿Qué queréis de mí?

Contestaron: “Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda.”

Jesús contestó: “No sabéis lo que pedís, ¿sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar?”

Respondieron:” Lo somos.”

Entonces Jesús les dijo: “El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautizareis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mi concederlo; está ya reservado.”

Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan.

Jesús, reuniéndolos, les dijo: “Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Vosotros, nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; el que quiera ser el primero, sea sirviente de todos. Porque el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.”

Comentario – reflexión sobre el evangelio:

El evangelio muestra una clara posición de Jesús ante el poder.

La escena se produce camino de Jerusalén, y en un momento en que Jesús está advirtiendo a sus discípulos el final doloroso que le espera a Él y a cuantos quieran seguir sus pasos…

Pero como no hay peor sordo que quien no quiere oír, los apóstoles, que siempre habían entendido el Reino que anunciaba Jesús como un Reino de dominio y de poder, andan disputándose los mejores cargos en este Reino, e incluso Jaime y Juan se atreven a pedirlos para ellos, situación que indigna a los otros que también los desean.

Advirtamos que este mismo pasaje, en el evangelio de Mateo es suavizado por el hecho de que fue la madre de Jaime y Juan la que pidió los cargos para sus hijos; pero aquí Marcos indica que son los mismos apóstoles los que andan discutiendo…

Y así las cosas es cuando Jesús aprovecha para ofrecerles una auténtica revisión de vida sobre el poder, con los tres puntos clásicos:

Ver: ¿qué pasa con los poderes de este mundo? Que normalmente los que los detectan los aprovechan para abusar de los demás y mirar sólo por sus propios intereses…

Juzgar: ¿qué juicio nos merece, como cristianos, esta manera de actuar? ¿Cómo actuó el mismo Jesús que no vino para ser servido, sino para servir a los demás y dar la vida por ellos?

Actuar: ¿Cómo ha de ser nuestra conducta en relación con el poder? La respuesta es muy clara: quien quiera ser importante que se haga servidor de todos, y quien quiera ser el primero, que sea el esclavo de todos…

En el ámbito de los principios, pues, este evangelio marca una manera de entender el poder que luego ha de ser llevado a la práctica de manera concreta. No bastan los principios si se quedan solamente en formulaciones teóricas; y a cada cual nos toca traducir en hechos nuestra manera de gestionar nuestros pequeños o grandes poderes.

Hoy vivimos en una sociedad que fomenta el hecho de convertir las personas en triunfadores individualistas, situación que normalmente no se consigue si no es sirviéndose de los demás y utilizándolos para sus propios intereses… Por eso la tarea que nos propone hoy el evangelio no resulta fácil…, pero, como alguien escribió, una Iglesia que no sirve, no sirve para nada…

Oración

Padre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy
nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.

Amén.


El próximo encuentro el viernes 19 de noviembre a las 19:30 (tercer viernes de mes).

Parròquia Nostra Senyora de Salas, Viladecans.



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